Seguro que tienes un lugar especial, un lugar que recuerdas con cariño. Quizás la casa de tú abuela cuando eras pequeña o la casa de veraneo de tú infancia. Ese recuerdo es lo que relaciona los lugares y la memoria.
Estos lugares son parte de lo que tú eres. Esos recuerdos forman parte de ti y te acompañaran toda la vida. A lo mejor no te das cuenta, pero en ocasiones son esas sensaciones las que buscas, ya sea para evadirte del estrés o para cargar las pilas.
Y es que los lugares y la memoria están íntimamente relacionados. La relación que tienes con el lugar y con las personas que lo habitan o lo han habitado marcan tú identidad. Son, como se suele decir, tus raíces.
Tu historia, lo que tú eres tiene un contexto, un lugar. A veces este contexto es determinante para un recuerdo y otras vece lo terminas olvidando. Pero siempre las emociones que desembocan en experiencia y estas en recuerdos suceden en algún sitio.
No te ha pasado que has llegado a un lugar y el cuerpo te ha dicho que en ese lugar se siente bien, a gusto. Esa sensación de bienestar en ese lugar tiene mucho que ver con los lugares de tú memoria. También es cierto que parte de ese bienestar está muy relacionado con la cultura y la sociedad en la que has crecido. Es cierto que parte de las sensaciones que sentimos pertenecen a lo que consensuamos como sociedad. Pero hay otra parte que solo te pertenece a ti.
El “espacio vivido” es como lo llama la filósofa Luz Gloria Cárdenas Mejía, ese espacio en el que la experiencia del cuerpo y la residencia “se insertan en el acto de vivir en”.
A partir de este espacio vivido el espacio geométrico, el construido, urbano y geográfico van ampliando las fronteras de lo que el cuerpo experimenta y de este modo nuestra relación con los lugares y las personas. Pasas así de tú residencia como referente al barrio, ciudad, país y a toda la geografía habitada. Lugares, paisajes y territorios se convierten en historia de lo que eres gracias a la memoria, a las experiencias que el cuerpo vive en ellos y sus relaciones con otros cuerpos.
La huella de lo que eres está en los lugares y a su vez tú vas dejando huella en los lugares y las personas.
Cuéntanos ¿Cuál es ese lugar de tú memoria?
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